Smart Cities – Una bocanada de aire fresco en un difícil contexto.
By Carlos Canet.
La rápida evolución y desarrollo de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) vienen a cubrir la urgente necesidad de nuevos discursos de ciudad y una mejora y eficiencia de la gestión del espacio público.
En un contexto de recesión y crisis social en la que estamos inmersos hablar y pensar la ciudad entorno a la idea Smart Cities supone una bocanada de aire fresco, además de la posibilidad de establecer nuevos entornos de colaboración no solo entre lo público y lo privado sino también entre la ciudadanía y su gobierno.
Las Smart Cities o Ciudades Inteligentes no vienen a descubrir nada nuevo que los urbanistas o “pensadores” de la Ciudad ya vinieran planteando décadas atrás. Sin embargo, permite adecuar los planteamientos y la planificación urbana a un nuevo contexto con un importante abanico de soluciones y gadgets tecnológicos.
De acuerdo, las Ciudades Inteligentes están de moda y tiñen todos los ámbitos de nuestro día a día, desde los discursos políticos, a los planteamientos técnicos, a las campañas marketing de las multinacionales o hasta las políticas 2014-2020 de la Unión Europea.
Y como todas las modas, hay planteamientos que se deben tomar con cautela, darles cierto tiempo y perspectiva para valorar su potencial.